Si queréis un postre terrorífico para celebrar la noche de Halloween esta es una magnífica opción. Además es supersencilla de preparar... Esta es la que hice el año pasado... y fue muy divertido servirla en la cena de la fiesta que celebramos...
Sólo vamos a necesitar:
- Una tarrina de queso de untar (puede ser light)
- Un bizcocho, o magdalenas... (como no tenía tiempo para hacer un bizcocho yo utilicé una bolsa de magdalenas). También podéis hacer un bizcocho "red velvet".
- Colorante rojo.
- Una pastilla de fondant blanco
- Azúcar glass.
- Sirope o mermelada de fresa.
Si preparáis un bizcocho "red velvet" es recomendable que lo hagáis utilizando un molde semicircular, así no tendréis que cortarlo para darle forma... y una vez frío pasáis directamente a decorarlo con el fondant.
Si optáis por utilizar un bizcocho normal o la versión magdalenas... pasaremos a preparar la base del "cerebro".
En primer lugar desmenuzamos las magdalenas...
A continuación añadimos el queso de untar...
Como las magdalenas ya son bastante dulces yo no le añado azúcar... tened en cuenta que el fondant es prácticamente azúcar...
Amasamos y añadimos el colorante rojo hasta tener la textura deseada...
No hace falta que amaséis hasta tener un color uniforme... es mejor que quede algo irregular, así parecerá "carne" cuando cortemos nuestra "tarta cerebro"...
Una vez que tenemos lista la "carne para nuestro cerebro" procedemos a envolverla en celofán y darle una forma un poco ovalada...
Metemos esa masa en el frigorífico para que se enfríe y se compacte mejor...
Lo colocamos sobre el plato y hacemos una hendidura longitudinal para definir los dos hemisferios del cerebro...
Ahora viene lo más divertido... hacer las circunvoluciones del cerebro... espolvoreamos un poco de azúcar glass o de harina de maíz sobre la zona que vamos trabajando, para evitar que el fondant se humedezca y se ablande...
Y decorar nuestro cerebro con fondant es de lo más sencillo... sólo tenemos que ir haciendo "churros" como cuando éramos pequeños y jugábamos con la plastilina... y vamos colocando esos churros sobre nuestro cerebro dando la forma que más nos guste...
Vamos poniendo los churros respetando la hendidura central, para que después se aprecie mejor... por lo demás los churros se pueden colocar sin ningún orden preciso...
y poco a poco nuestro cerebro va tomando forma...
Una vez tenemos lista una mitad pasamos a decorar la otra...
De este modo quedan bien definidos los dos hemisferios cerebrales...
Si es necesario espolvoread un poco más de azúcar glass...
hasta terminar de cubrir todo el pastel...
Os recomiendo que lo preparéis con la menor antelación posible, ya que el fondant se ablanda con la humedad... por lo que lo mejor es decorarlo en el último momento... para que aguante mejor... y luego guardarlo bien tapado hasta el momento de servirlo...
Y justo antes de servirlo añadimos el sirope de fresa para darle un aspecto sanguinolento...
Y como detalle final le clavamos un cuchillo...
Terrorífico... y delicioso...